Las últimas palabras de Amber McLaughlin, la primera mujer transgénero en ser ejecutada en EE.UU.
Desde una cárcel en Missouri, Amber McLaughlin, de 49 años, respiró pesadamente par de veces y dijo unas breves palabras antes de que le inyectaran la dosis fatal de pentobarbital
Amber McLaughlin, la primera mujer transgénero en ser ejecutada en Estados Unidos, pidió perdón por su crimen antes de que le aplicaran la inyección letal este martes en Missouri.
McLaughlin, de 49 años, respiró pesadamente par de veces antes de que le inyectaran la dosis fatal de pentobarbital.
McLaughlin, quien comenzó su transición de género hace unos tres años en la prisión, murió anoche después de que el gobernador del estado, el republicano Mike Parson, rechazara su pedido de clemencia.
“Estoy arrepentida de lo que hice”, indicó la convicta. “Yo soy una persona amorosa y bondadosa”, añadió.
McLaughlin, de 49 años, fue condenada por la violación y asesinato en el 2003 de su exnovia Beverly Guenther, en el condado St. Louis. La asesina lanzó el cuerpo cerca del río Mississippi en St. Louis.
El jurado no llegó a un acuerdo sobre la sentencia, por lo que un juez condenó a la acusada a la pena de muerte en el 2006.
Missouri e Indiana son los únicos dos estados donde la ley permite que el juez que preside el proceso imponga la pena de muerte en caso de que el jurado no se decida.
En su argumento para rechazar el pedido de clemencia, Parson catalogó a McLaughlin como una criminal violenta.
“La convicción y sentencia de McLaughlin permanecen luego de múltiples y minuciosos exámenes de la ley de Missouri. McLaughlin acosó, violó y asesinó a la Srta. Guenther. McLaughlin es una criminal violenta”, indicó Parson.
“La familia y seres queridos de la Srta. Guenther merecen paz. El Estado de Missouri llevará a cabo la sentencia de McLaughlin de acuerdo con la orden de la Corte y se hará justicia”, añadió el funcionario en declaraciones escritas.
Esta ejecución no solo fue la primera de un hombre o mujer transgénero en EE.UU., sino la primera del año en el país.
McLaughlin se expresó con el respaldo de un asesor espiritual a su lado.