Se soltó del arnés para una selfie y murió tras caer 200 metros en el monte Nama
Un trágico accidente en China ha vuelto a encender el debate sobre los riesgos de las selfies extremas. Un alpinista de 32 años perdió la vida en el monte Nama, parte del macizo del monte Gongga, en la provincia de Sichuan, luego de soltarse de su cuerda de seguridad para tomarse una fotografía.
De acuerdo con las primeras investigaciones, el montañista se desató del arnés en un punto de gran altitud con el objetivo de capturar una imagen. En ese momento perdió el equilibrio y resbaló por una pendiente helada, cayendo más de 200 metros. El cuerpo fue localizado a 5.300 metros sobre el nivel del mar, en una zona de difícil acceso que obligó a desplegar un complejo operativo de rescate.
El accidente, grabado en video y viralizado en redes sociales, ha generado un intenso debate sobre la responsabilidad en actividades de aventura y los límites de la búsqueda de la “fotografía perfecta”. Usuarios y expertos en alpinismo subrayan la importancia de respetar los protocolos de seguridad en entornos de alta montaña, donde cualquier descuido puede ser fatal.
El monte Nama, con una altitud de 5.588 metros, es conocido por su elevada dificultad técnica y sus cambiantes condiciones climáticas. Estas características lo convierten en un reto incluso para escaladores experimentados, lo que hace aún más peligroso cualquier tipo de maniobra fuera de las medidas de seguridad.
La tragedia se suma a una serie de incidentes que, en los últimos años, han evidenciado los riesgos de la exposición en escenarios extremos motivada por el fenómeno de las selfies virales.
