Nueva York. — El rapero y productor musical Sean “Diddy” Combs fue sentenciado este viernes a 50 meses de prisión (4 años y dos meses) por cargos relacionados con la prostitución, tras un extenso proceso judicial que reveló episodios de violencia, coerción y abuso en su vida privada.

El fallo fue dictado por el juez federal Arun Subramanian en una corte de Manhattan, después de escuchar a la fiscalía, la defensa, víctimas y familiares del artista. Además de la pena de cárcel, Combs deberá pagar una multa de 500.000 dólares y permanecer bajo libertad condicional por 5 años una vez cumplida su condena.

La sentencia se dio tres meses después de que un jurado lo declarara culpable de transportar personas entre estados para encuentros sexuales pagados, en violación de la Ley Mann. Aunque la fiscalía había solicitado al menos 11 años de cárcel, y la defensa apenas 14 meses, el juez se inclinó por una sanción intermedia.

Durante el juicio, testigos relataron fiestas privadas conocidas como “Freak Offs”, donde Combs combinaba drogas, escorts y parejas a quienes obligaba a participar mientras él observaba y grababa. La cantante Casandra “Cassie” Ventura denunció que durante una década fue forzada a mantener relaciones sexuales con desconocidos cientos de veces. El jurado también presenció un video en el que Combs la golpeaba y arrastraba en un hotel de Los Ángeles en 2016.

Aunque el artista de 55 años fue absuelto de cargos por tráfico sexual y crimen organizado, el juez consideró que las pruebas de abuso físico, emocional y psicológico debían pesar en la sentencia. “Un historial de buenas obras no puede borrar los antecedentes en este caso”, expresó Subramanian.

En la audiencia, Combs pidió clemencia mediante una carta en la que reconoció haber perdido el rumbo por las drogas y los excesos. Aseguró que la prisión lo había transformado y que estaba sobrio por primera vez en 25 años. Sin embargo, sus víctimas lo describieron como un hombre manipulador y peligroso, incapaz de cambiar.

El magnate musical, con barba canosa y semblante sereno, abrazó a sus abogados y saludó a su familia antes de escuchar la condena que lo llevará a prisión hasta al menos 2029.