DE COMPRAS CON LA POLICÍA: UNIDOS POR UNA NAVIDAD DE SONRISAS
Por Irene Díaz-Bazán
ATLANTA.-
Alejandrina Sierra no dudó en desplazarse 30 millas en taxi desde su hogar en Lawrenceville, en el condado de Gwinnett, hasta esta tienda en Brookhaven en DeKalb. Con su pequeño hijo en silla de ruedas, cada milla valió la pena porque algo especial los esperaba.
Gracias al programa navideño “De compras con la policía” (Shop with a Badge) una iniciativa comunitaria del Departamento de Policía de Brookhaven, en colaboración con varias agencias del orden, decenas de niños y familias en situación vulnerable reciben un regalo especial durante estas fiestas.
La iniciativa que comenzó en 2014, es posible gracias a la colaboración con tiendas Target. Aquí, cada niño tiene la oportunidad de disfrutar de un día de compras junto a un oficial de policía asignado. Este programa utiliza los fondos recaudados en la maratón anual de 5 millas, Hot Pursuit Glow Run, que busca impactar directamente las vidas de niños desfavorecidos en el área de Brookhaven.
El oficial José Pimentel de la policía de Brookhaven, deja el uniforme por unas horas para ser el Santa de la fiesta y regalar emociones a los más pequeños y a sus padres.
“Este es el evento favorito de la mayoría de los departamentos policiales. Aquí todos trabajaron anoche, pero vienen voluntariamente para ayudar a las familias que más lo necesitan”, dice.
En la jornada de compras participaron agentes del GBI, la policía de Sandy Springs, la policía de DeKalb, entre otros.
Durante el evento, un policía y un menor hacen compras de ropa, juguetes y artículos esenciales que forman parte de sus listas de deseos. Unas listas que incluyen tres cosas importantes: Algo que necesitan, algo que quieren y algún artículo que puedan compartir con su familia.
Alejandria, sabe que cada regalo representa una ayuda invaluable para su hijo José Alejandro, de 8 años.
“Le compraron ropa y zapatos, algo que realmente necesitaba… “, expresa.
José Alejandro tiene autismo y una discapacidad motora que le impide caminar biem. Su día a día está lleno de desafíos y cuidados especiales.
“Aún usa pañales. Este tipo de ayuda significa mucho para nosotros”.
Detrás de cada sonrisa, oficiales, voluntarios y socios comunitarios unen esfuerzos para fortalecer los lazos con la comunidad, derribando estereotipos y prejuicios.
El Oficial Byk de la Policía de Brookhaven asegura sentirse orgulloso de los aportes de su departamento policial y reconoce el ángulo humano del gesto de solidaridad.
“Nos sentimos orgullosos de devolver algo a la comunidad y demostrar que la policía también es humana, como ellos”, sostiene.
El verdadero espíritu del programa “De Compras con la Policía” no solo radica en los regalos. Su misión es clara: fomentar la confianza, el respeto y recordar que las fuerzas del orden están aquí para proteger y servir.
Y es que en esta Navidad, la generosidad y el servicio unen corazones, transformando desafíos en sonrisas y recordándonos que la solidaridad siempre es el mejor regalo.
