¡Miguel Mateos en vivo!

Share:

Duluth.-
En una noche espectacular, con clima templado, algo frío pero con mucho calor en el corazón, se presentó Miguel Mateos en concierto en Atlanta acompañado de Mikel Erentxun, excantante de la banda Duncan Dhu, trayéndonos lo mejor de su repertorio musical, así como una excelente puesta escénica, impresionantes efectos luminotécnicos y un excelente sonido.

A las 9.30 de la noche abrió la velada Mikel Erentxun, deleitándonos con lo mejor de su carrera no solo en solitario sino también incluyendo algunos de los grandes éxitos de Duncan Dhu, como “Una calle de París” y “En algún lugar” con la que cerró su set, para darle paso a la gala qué todos estábamos esperando, lo que todos habíamos querido presenciar: Don Miguel Mateos finalmente en Atlanta, en vivo, en persona.
Muchos habíamos esperado por décadas, incluso, mucha gente en la audiencia jamás había tenido la oportunidad de asistir a alguno de sus recitales ¡Era su primera vez!

EL ÉXTASIS INFINITO
Las luces y el sonido se apagan y todos sabemos lo que eso significa : El show va a comenzar. Se ilumina la pantalla gigante atrás del estrado ofreciendo imágenes de Miguel Mateos mientras que al mismo tiempo se escucha una música épica como introducción a lo que será la aparición del ídolo en escena, quien finalmente surgirá con todos sus músicos al momento en que se encienden todas las luces y la algarabía en el público es total, la emoción de los fans es indescriptible, la conexión del artista con sus seguidores es inenarrable, profunda, casi sagrada, el éxtasis es infinito…

Nada mejor que “Mi sombra en la pared” para abrir el show, canción que nos remonta a los lejanos ochentas, transportándonos imaginariamente a nuestra juventud o adolescencia, época en que todo parecía más fácil y teníamos menos problemas.
Uno tras otro desfilaron los éxitos como “Llámame”, “Si tuviéramos alas”, “Lola”, así como los inolvidables “Es tan fácil romper un corazón”, “Obsesión” y “Cuando seas grande”, con el cual cerró con broche de oro una fiesta que no queríamos que termine jamás, queríamos más y más música y que la noche nunca llegue a su fin.
El carisma, humildad y alegría de Don Miguel Mateos son dignos de admirar, un hombre que lleva felicidad y buena música a dónde va, un artista que nunca traicionó sus conceptos musicales, o como él mismo lo dijo durante el concierto con sus propias palabras : “Acá no hacemos reggaetón…”, muy sabio él…

Después de éste show, me retiro a casa, habiendo disfrutado de una exhibición de excelente arte musical, entrega total del artista para con su público y una devoción que nunca debe terminar: la del melómano a la buena música. Después de éste show me voy tranquilo a casa, por la ciudad, con mi guitarra sin molestar a nadie…

 

Share: