Condado de Gwinnett, Georgia – Jahlin Javante Corey y Dennisa Mary Vega, ambos de 33 años, fueron declarados culpables y sentenciados a prisión por la muerte de Amir Vega, un bebé de 10 meses e hijo de Dennisa Mary Vega. La Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Gwinnett confirmó la sentencia tras un juicio que reveló el brutal abuso que sufrió el menor.

El 2 de septiembre de 2019, los servicios de emergencia respondieron a una llamada en el apartamento de la pareja en Beaver Ruin Road, Norcross. Al llegar, encontraron a Amir inconsciente y con dificultades respiratorias. El bebé presentaba quemaduras en la boca y abrasiones en la cara, y solo lograba respirar seis veces por minuto. A pesar de los intentos de reanimación, fue declarado muerto en el Children’s Healthcare of Atlanta.

La autopsia reveló lesiones internas graves, incluyendo una fractura de cráneo, costillas rotas, laceraciones en la lengua y boca, hematomas en el abdomen y brazos, y un desgarro en el intestino delgado. La Dra. Carol Terry, examinadora médica del Condado de Gwinnett, testificó que las lesiones eran consistentes con abuso prolongado y ocurrieron días antes de la muerte del niño.

Corey fue sentenciado a 50 años, con 15 años de prisión efectiva. Vega recibió una sentencia de 21 años, también con 15 años de encarcelamiento. Ambos tienen prohibido el contacto sin supervisión con niños menores de 12 años, incluyendo a sus propios hijos.

Además de homicidio involuntario y agresión, Vega fue condenada por crueldad infantil en segundo grado. Corey fue declarado culpable de dos cargos de agresión agravada y un cargo de agresión. La Fiscal de Distrito del Condado de Gwinnett, Patsy Austin-Gatson, declaró que “Este bebé de 10 meses, Amir Vega, murió como resultado de los crímenes de estos acusados. Esperamos que este veredicto envíe un mensaje claro de que los niños deben ser cuidados y no abusados en nuestra comunidad.”