César Montes y Gerardo Arteaga salieron expulsados del partido, además sonó el grito homofóbico

La prueba más importante para la dirección de Diego Cocca con la selección mexicana se trató de su partido contra Estados Unidos, juego correspondiente a la semifinal de la Nations League. El duelo era de relevancia para el técnico argentino, pues demostraría la renovación del Tri después de lo sucedido en la Copa Mundial de Qatar 2022.

Sin embargo, desde el minuto 37 el conjunto de las Barras y las estrellas sobrepasó al Tri y poco a poco los jugadores nacionales perdieron la paciencia y se desató una riña dentro del área de juego. Fue al segundo tiempo, cuando EEUU ganaba 2 – 0, que se desató una discusión que terminó con la expulsión de César Montes y Weston McKennie.

Cerca del minuto 68, en una jugada a tres cuartos de la cancha, los estadounidenses tenían el dominio del esférico, así que intentaron protagonizar un contragolpe para aumentar la ventaja en el marcador, pero para evitar la ventaja de los norteamericanos, César Montes cometió una infracción al derribar a su rival con una patada indebida.

Debido a que su jugada defensiva no iba en dirección al balón, el árbitro notó la falta de Montes, por lo que no dudó un instante en detener la acción para mostrarle la tarjeta roja y mandarlo a los vestidores antes de tiempo. Pero, en cuestión de segundos, ambos equipos protagonizaron unos empujones e intercambio de palabras..

Por la manera en la que el jugador del Espanyol derribó al estadounidense, el equipo local salió a defender al futbolista que quedó tendido y empezó un conato de bronca, ya que miembros de ambas selecciones iniciaron algunos reclamos.

El Cachorro no abogó nada para evitar la tarjeta, pues los empujones entre los jugadores llamó la atención del resto del cuerpo arbitral, así que intentaron calmar la riña.

Incluso Memo Ochoa llegó a la zona para calmar a sus compañeros, quienes mostraban una notoria frustración por el resultado que tenían hasta ese momento. Debido a que la discusión llegó hasta la zona de los técnicos, Diego Cocca también intentó calmar a sus jugadores y poco a poco los fue alejando de la polémica.

Sin embargo, entre los empujones Weston McKennie terminó con la camiseta rota, por lo que le pidieron cambiarse. Pero al momento de hacerlo se dirigió a la afición y se burló por el 2 – 0 que tenían hasta ese momento, hecho que no toleró el árbitro salvadoreño y lo expulsó de igual forma.

Fue así que al minuto 70 ambas selecciones terminaron con un jugador menos y tuvieron que continuar el resto del partido con 10 jugadores respectivamente.

Cuando parecía que el mal momento ya había terminado, cayó el tercer gol de Estados Unidos. Ricardo Pepi se encargó de marcar el tercer tanto para su equipo; aunque parecía que sería marcado como fuera de lugar, la acción fue válida y se marcó como bueno el gol.

El descontento de la afición, así como de la selección mexicana, aumentó, por lo que se desató una segunda pelea en la cancha. Ésta ocurrió poco antes del minuto 85, cuando el equipo mexicano intentó cobrar rápido un saque de manos, pero al momento de pedir el balón Edson Álvarez empujó a un jugador norteamericano, lo que desencadenó otra riña.

Al lugar llegó Gerardo Arteaga, quien llegó por espaldas y atacó a Sergiño Dest, por lo que el norteamericano le respondió la agresión. Tal hecho causó que Arteaga y Dest se llevaran la tarjeta roja y Edson Álvarez la amarilla. Más empujones causó que Ochoa también saliera amonestado.

Los últimos minutos del partido se vieron interrumpidos por el grito homofóbico, por lo que el juego se suspendió en dos ocasiones, así que se agregó 12 minutos de compensación.